Algunas de las bodegas de la villa de Pesquera de Duero:

    

   Bodegas Alejandro Fernández:  Fundada en 1972 por Alejandro Fernández, fruto de su tenacidad y sus conocimientos heredados de la tradición vinícola familiar. La bodega inicial es un pequeño lagar de piedra, del siglo XVI que se ha ido transformando para convertirse en la actualidad en una moderna bodega respetando lo mejor de su historia. La pulcritud en el cuidado de sus propios viñedos, que oscilan entre los 15 y 30 años de antigüedad y el esmero en la elaboración de sus vinos, han hecho de estos, unos de los mas prestigiosos del mundo.

      Bodegas Ascensión Repiso Bocos:  Artesana tradición familiar, Ascension Repiso ha nacido y vivido en Pesquera de Duero. La elaboración del vino ha sido para ella casi innato, las rivalidades vecinales por ver quien presentaba el mejor vino en la mesa, han hecho de este pueblo y de sus habitantes un referente a la hora de hablar de vinos de calidad. Ascensión Repiso elabora vinos de crianza. Las uvas proceden de viñedos propios, lo que permite un continuo seguimiento a lo largo del año. En la bodega se vinifica en pequeños depósitos de 5000 y 10000 litros de capacidad. Posteriormente el vino pasa a las barricas para realizar el proceso de crianza. Se elabora una pequeña producción entorno a las 20.000 botellas al año. Estas limitadas producciones permiten observar la evolución de los vinos en cada una de sus barricas.

   Bodegas Álvaro Arranz:  Aunque esta bodega fue creada en el año 2005, mediante la unión de un grupo de socios, algunos de ellos llevaban toda su vida realizando el vino de forma familiar. Desde un primer momento, hicieron los cuatro tipos de vino que siguen realizando en la actualidad. Los vinos que esta bodega producen son: Roble, Crianza, Joven y Rosado. Desde el momento de la creación de la bodega y la unión de todos los propietarios de esta hasta la actualidad, siguen produciendo los diferentes tipos de vinos y comercializándoles por diferentes lugares de España.

    Bodegas Monasterio: La historia de la finca Hacienda monasterio se remonta al siglo XIX, que perteneció a la familia Lecanda. La construcción de la bodega es de 1991, así como la elaboración de su primer vino. Cuentan con viñedos propios tanto de cepas viejas como de cepas replantadas durante los años de 1990 y 1991. Sus instalaciones poseen modernos equipos para la vinificación y un importante parque de barricas para su crianza. Su vino es ya un clásico de la Ribera, una joya fruto del buen hacer de la bodega.

   

  Bodegas Emilio Moro:  Aunque comenzaron a comercializar su vino en el año 1987, Emilio Moro, su fundador, procede de una familia de larga tradición vitivinícola, sus viñedos ya pertenecieron a su padre y poseen el clon mas puro de la uva autóctona, con él ha ido injertando el resto de viñedos adquiridos con el tiempo. La bodega actual se inauguro en el año 2001, moderna y funcional, equipada con las últimas técnicas enológicas. Elaboran y crían unos caldos con personalidad propia, fruto de la sabia unión entre la tierra y el hombre que ya han obtenido importantes premios y galardones.

     Bodegas Federico Fernández: Bodega de carácter familiar de una dilatada tradición bodeguera, fundada por Federico Fernández en 1986. Cuentan con viñedos propios. Así la inteligente combinación entre la naturaleza de sus viñedos y su consolidada técnica bodeguera hacen que sus vinos sean excelente por naturaleza.

     Bodegas y el viñedos el Jaro: Fundada en el año 2000, perteneciente a la familia Osborne de larga tradición viticultora, asentada en la Finca El Quiñon, y formada por distintos pagos de viñedos, algunos de ellos con más de 80 años de edad. La bodega esta dotada de la última tecnología constituida por tres naves donde se desarrolla todo el proceso de elaboración y crianza de unos vinos basados en la calidad y selección de sus uvas y en la experiencia y bien hacer de su potencial humano.

 Bodegas Dehesa de los Canónigos:  Nombre de reminiscencias religiosas por su vinculación con el arzobispado tanto de Palencia como de Valladolid. Después de la desamortización de Mendizabal en 1845 paso a manos de Toribio Lecanda. Y a finales de los años 60 del pasado siglo XX Luis Sanz se hizo cargo de esta finca y su bodega, que es un conjunto de pequeñas edificaciones en torno a un caserón. Poseen viñedos propios y un moderno equipamiento para la vinificación y crianza de unos vinos que reflejan la ilusión y el empeño de un trabajo bien hecho.

     Bodegas Bohórquez: Es una bodega familiar, cuya primera cosecha fue en el 2002, cuentan con viñedo propio (Tempranillo, Cabernet Sauvignon y Merlot) ubicado a 900 metros de altura en el Páramo de Valderramiro, tratado con cariño para trasladar a los racimos toda la esencia del terruño. Una bodega que aúna tradición y vanguardia, con una alta tecnología de vinificación y un importante parque de barricas del mejor roble, para elaborar despacio un excelente vino, un tinto único.

    

     Bodegas Parxet: Creadas por el grupo de bodegas Parxet en 1995, la primera añada que se comercializo fue la de 1996, cuentan con viñedos propios y una avanzada tecnología para la vinificación y crianza de los vinos. 

     Estas son algunas de las bodegas de Pesquera de Duero, no son más importantes, pero son de las que más información se dispone y se saben más cosas sobre cada una de ellas, a continuación enunciare algunas de las otras bodegas que hay también en el la localidad de Pesquera de Duero:


  Valdemoral
  Vallarín
  Servilio Arranz
  Epifanio Rivera
  Cantamora
  Piedras de San Pedro
  Tionio
  El molar
  Santos Arranz
  Valdecuriel
  Prios